martes, 15 de octubre de 2013

Las nuevas construcciones optan por la biomasa

Un edificio ‘verde’ que se nutre de biomasa y minimiza las emisiones.


Sostenibilidad, integración en el entorno de prados y monte y un consumo mínimo de energía son algunas de las claves sobre las que gira este edificio, creado por el mismo equipo que ha diseñado equipamientos tan singulares —y premiados— como el Instituto de Medicina Legal de Madrid, el Auditorium Park de Barcelona, el complejo Mahler 4 de Ámsterdam o el Centro Tecnológico de La Rioja, amén de proyectos en marcha en Europa, América y Asia.
«Un elemento destacado en lo que respecta a la estrategia ambiental del edificio ha sido la minimización de su consumo energético durante las fases de construcción y de uso. Para ello, se han elegido materiales con una baja energía incorporada (embodied energy), y se ha optado por un diseño arquitectónico que incorpora estrategias pasivas, jugando con la orientación, la forma, y las características de los materiales», informó el arquitecto Pep Wennberg, del estudio AZPML. «A estas estrategias activas y pasivas s añade la utilización de biomasa como fuente energética, reduciendo las emisiones de CO2 en relación a la utilización de combustibles fósiles. El edificio ha sido concebido para obtener la calificación energética A», continúa la memoria, que también explica cómo el cerramiento exterior principal «se diseña como una fachada ligera de madera» con «cerramientos acristalados», y que la estructura vertical de las naves 1 a 4 se realiza «mediante pórticos de madera laminada», todo lo cual otorga al edificio una gran ligereza y luminosidad.
Un centro diseñado, así pues, en sintonía pefecta con la filosofía de la Fundación, donde el medio ambiente, la música, la sociología y las acciones culturales son la prioridad.

Fuente: http://www.diariodeleon.es/